Ke onda. Saludos a todos.
Bueno, pues después de lo acontecido durante el X COngreso Nacional del Partido de la Revolución Democrática, uno, ke es miembro de dicho instituto político, no puede menos ke indignarse por lo cínicos ke pueden ser la gente de Nueva Izquierda, mejor conocida como los Chuchos o Mierda Izquierda.
Por ke si alguien pensaba ke existía alguien peor en el PRD ke René Bejarano o Cuauhtémoc Cárdenas… ¡¡¡ No !!! ¡¡¡ Sorpresa !!! son los chuchos y están en el PRD para enquistarse o, si se puede, para ke no quede nada de la Izquierda en México.
Porke ellos han sido quienes han traicionado al Pueblo de México por 30 monedas de oro (o 400 millones de pesos, lo ke es lo mismo) a cambio de vender su dignidad y el Partido al mejor postor, para ke el PRD sea un brazo más de la derecha de éste país, y para ke la política neo-liberal siga empobreciendo cada vez más a la sociedad mexicana. ¿Como chingados se puede pensar otra cosa al imponer un resolutivo para negociar con el gobierno ususrpador espurio, para negociar con el pelele? Y ya verán si no, en un par de años el PRD gana una, dos o hasta tres gobernaturas, claro, con candidatos de los chuchos, a modo, y con el apoyo del gobierno de FeCal.
El PRD no puede ser víctima de estos ojetes. No puede ni debe ser. El PRD tiene ke cumplir con su responsabilidad histórica, ke es impulsar las demandas de la sociedad como oposición y como gobierno. El PRD no puede ser parte de ese uso faccioso del poder, de la política sin escrúpulos, de la política donde importa el interés de los poderosos menos el del pueblo. El PRD no puede ser cómplice de los traidores a la Patria, a quienes se han sumado Nueva Izquierda, Héctor Bautista y su ADN, el clan de los Cárdenas y otros miembros más. No, no puede ni debe ser así.
Todos y todas, a partir de hoy, tenemos ke rescatar al poder de las garras del poder. Y sólo Alejandro Encinas garantiza retornar al PRD a su cauce de Partido de Izquierda, de Partido donde encuentren su cauce las demandas sociales, donde el Poder se reivindique con la gente, y donde se pueda ejercer la verdadera oposición al poder sin corromperse con ella. De otra forma, estaremos convirtiendo al PRD en el Nuevo PRI, y en un apéndice más de la derecha conservadora en el poder.